La ruta panorámica
noruega de Hardanger
Conduce por una postal real.
La ruta panorámica de Hardanger es una de las 18 rutas panorámicas noruegas y está rodeada de una belleza natural impresionante a cada paso.
Un buen punto de partida es la extravagante ciudad de Odda, donde incluso podrás pasar la noche en una singular casa del árbol Woodnest.
Odda es la base perfecta para explorar la naturaleza de la zona, como...
… la enorme cascada de Låtefossen. Se encuentra a unos 20 minutos al sur de Odda en coche y se atraviesan carreteras serpenteantes y con países alucinantes. Es un comienzo o final perfecto para la ruta panorámica.
Atraviesa el puente de piedra para contemplar el salto del agua hacia al río.
A solo 10 minutos al norte de Odda encontrarás Tyssedal, punto de partida de la famosa excursión Trolltunga. Si te apetece un reto difícil, puedes recorrer los 27 kilómetros que separan la formación rocosa que sobresale 700 metros sobre el lago Ringedalsvatnet.
La excursión dura entre 8 y 12 horas. Si quieres hacerla en invierno, es mejor ir con un guía.
Puedes ir al museo de la energía en Tyssedal y aprender más sobre la energía hidroeléctrica noruega, o visitar el baño real del káiser Guillermo II. Visitaba Noruega con frecuencia a principios del siglo XX y se le atribuye el inicio del turismo de fiordos en Noruega.
Unos 27 kilómetros más adelante llegarás a Espenes, donde verás tanto un mirador para hacer fotos como un área de descanso con un diseño único.
Si sigues durante unos 30 kilómetros por Sørfjorden, un brazo del fiordo de Hardanger, llegarás a los idílicos pueblos de Lofthus y Kinsarvik.
Quédate una o dos noches para disfrutar de las vistas al fiordo, las colinas onduladas y las majestuosas montañas.
Es una parada ideal para comer: hay varias panaderías y restaurantes locales y en temporada se pueden comprar cerezas, fresas y frambuesas recién recogidas en puestos junto a la carretera. A menudo basta con dejar unas monedas en una caja y llevarte una cestita.
Si buscas algo más lujoso, alójate en el histórico hotel Ullensvang. Su spa de primera clase, con un canal exterior para nadar y vistas espectaculares al fiordo, es toda una experiencia.
Esta zona rebosa de belleza natural y está llena de rutas de senderismo increíbles.
Si tienes experiencia en montaña, atrévete con Dronningstien, o la ruta panorámica de la reina Sonia de Noruega. Son entre 6 y 9 horas de caminata con un desnivel de 1100 metros.
No es ningún secreto que esta zona es famosa por sus exuberantes huertos. Los productores locales estarán encantados de mostrarte sus interminables hileras de delicados frutales. Además, podrás probar sus deliciosas manzanas, su sidra, su zumo de manzana sin filtrar y muchos otros productos.
¿Te animas a recorrer la ruta de la fruta? Son 7 kilómetros que van del hotel Ullensvang al hostal Hardanger y atraviesa paisajes llenos de encanto.
Toma el ferri de 30 minutos desde Kinsarvik hasta el histórico pueblo de Utne. ¿Quieres alojarte en un sitio auténtico? El hotel Utne, el hotel de madera más antiguo de Noruega, empezó como posada en 1722. Dato curioso: siempre lo han dirigido mujeres con mucha personalidad.
Descubre más sobre la cultura local en el museo folclórico de Hardanger.
Si te diriges al suroeste por la estrecha carretera que va de Utne a Jondal, en una hora aproximadamente llegarás a un ferri que cruza el fiordo hacia Tørvikbygd.
¿Y qué te parecería desviarte al pintoresco pueblo de Rosendal antes de cruzar? Allí puedes visitar el castillo más pequeño de Escandinavia, Baroniet, construido en 1665.
A solo 20 minutos en coche desde la terminal del ferri en Tørvikbygd te espera la mágica cascada Steinsdalsfossen. Además, puedes caminar por detrás de ella sin mojarte gracias a una plataforma.
Para verla con su mayor caudal, lo ideal es visitarla en mayo o junio.
Ten en cuenta que algunas partes cierran en invierno.
A tan solo cinco minutos de allí se encuentra el encantador pueblo de Norheimsund, otro lugar perfecto para pasar una o dos noches.
Descubre las tiendas y los restaurantes locales.
Sigue conduciendo por las sinuosas carreteras junto al fiordo durante unos 30 minutos hasta llegar a otro precioso lugar de descanso: Steinstøberget.
Hay servicios, zonas para sentarse y bancos junto al fiordo desde donde puedes contemplar las vistas del fiordo de Hardanger y el imponente glaciar Folgefonna. Incluso hay un lugar justo al borde del agua, por si te apetece pescar.
Disfruta de los últimos 30 minutos de la ruta panorámica mientras conduces hacia Granvin por otra carretera estrecha y serpenteante. Si aún te queda algo de tiempo, puedes hacer un pequeño desvío: la cascada Skjervsfossen está a solo 10 minutos en coche. También es un buen punto de inicio si prefieres hacer la ruta en sentido contrario.
Haz una pausa en una de las áreas de descanso para contemplar las cascadas gemelas que se precipitan desde 150 metros de altura.
Atención: la carretera a la cascada está cerrada en invierno.
Si tienes tiempo, merece la pena continuar por el puente de Hardanger. Es uno de los puentes colgantes más largos del mundo y conecta las orillas sur y norte del fiordo. Hay aparcamientos a ambos lados del puente y puedes cruzarlo en coche, en bici o a pie.
Tras cruzarlo, conduce unos 20 minutos más hasta llegar al encantador pueblo de Eidfjord. Pasea por el centro o anímate a hacer alguna de las muchas rutas de senderismo de la zona.
A pocos minutos en coche por un túnel serpenteante desde Eidfjord se encuentra la imponente cascada Vøringsfossen.
Aquí comienza otra ruta de la región: la ruta panorámica de Hardangervidda. Tiene 67 kilómetros de longitud y va hacia el este, entre Eidfjord y Haugastøl.
Ten en cuenta que la carretera está abierta todo el año, pero las condiciones meteorológicas en invierno pueden afectar a la conducción y provocar cierres temporales.