Varanger
Naturaleza salvaje
En el rincón noreste de Noruega, miles de aves sobrevuelan un terreno árido y rocoso.
¿Estás preparado para hacer un viaje al fin del mundo?
Al menos, puede que sea lo que sientas mientras recorras la ruta panorámica noruega, que atraviesa un paisaje que recuerda al de la superficie de la luna…
… y pasa por Vardø, una isleta a la que te recomendamos parar para echarle un vistazo al Steilneset Minnested, o “monumento de las brujas”.
Junto a este emotivo monumento, podrás conocer la trágica historia de las 91 personas, en su mayoría mujeres, que fueron quemadas en la hoguera durante las cazas de brujas del siglo XVII.
Tras esto, continúa tu recorrido por la ruta panorámica hasta llegar a…
… Hamningberg. (Nota: La ruta panorámica nacional permanece cerrada en invierno con motivo de las nevadas).
Este pintoresco antiguo pueblo pesquero (ahora abandonado) es uno de los pocos lugares que los alemanes no quemaron durante su retirada a finales de la Segunda Guerra Mundial. Muchas de las casas del siglo XIX aún siguen en pie.
En Varanger, podrás ver también algo muy especial…
… ¡esta cosita tan mona!
El frailecillo del Atlántico es una de las más de 150 000 especies de aves que podrás ver de cerca en la isla de Hornøya, el mayor nido de Noruega, y entre las que se incluyen además los araos y las águilas marinas.
La empresa arquitectónica Biotope ha diseñado unas cabinas de avistamiento especiales que además sirven para refugiarse de las inclemencias del tiempo.
De todas formas, no hace falta ser un aficionado de las aves para pasar un rato aquí. Disfruta de paisajes increíbles todo el año bajo el sol de medianoche o las auroras boreales, si tienes suerte.
Además, hay muchas más cosas que explorar en esta zona. Haz una excursión en barco o ve a hacer senderismo, escalada, ciclismo, buceo, o pesca para intentar atrapar…
… ¡este monstruo!
El cangrejo rey es una de las especies más deliciosas del mar de Barents. ¡Prueba el cangrejo real en un safari sobre esta especie! Si tienes suerte, puede que además te topes con alguna ballena.
Vardø es una de las ciudades más antiguas del norte de Noruega. Además del monumento de las brujas, es famoso por su historia…
… pero también por cosas más modernas, como su arte urbano.
Tras muchos años sufriendo un descenso demográfico, el famoso creador de arte urbano Pøbel invitó a varios artistas a formar parte de un proyecto que en 2012 volvió a llenar las calles de vida. En la actualidad, hay una obra en prácticamente todas las esquinas.
No hace falta ir al sur para encontrar playas preciosas.
Echa un vistazo a la “Riviera del Ártico” de Varanger: Ekkerøy. Explora sus extensas playas de arena y nada en las cristalinas aguas del Ártico.
¡Pero cuidado, la temperatura es para los más vikingos! Brrrr…
Sus coloridas casas y un ambiente apacible hacen del pequeño pueblo pesquero de Skallelv un sitio que merece la pena visitar.
Si buscas algo más urbano, conduce media hora en dirección sur y llegarás a Vadsø, una de las mayores ciudades de esta parte de Noruega.
A finales del siglo XIX, la mayoría de las personas de Vadsø eran de origen kven o finlandés. En la actualidad, gran parte de su población sigue hablando finés y kven.
Vadsø está precioso en invierno, ¿no crees?
Hablando del invierno, Varanger es el sitio ideal para visitar cuando viene el frío. Prueba a hacer pesca en hielo, caminar con raquetas de nieve, hacer surf en el Ártico, hacer volar una cometa o incluso hacer amigos de cuatro patas en una travesía en trineo con perros.
No te olvides de explorar también la parte noroeste de Varanger.
Si quieres dormir a cuerpo de rey, alójate en Kongsfjord Guesthouse. Estos antiguos edificios del puerto se han remodelado para preservar la cultura y tradiciones de la zona y mantenerlos llenos de historia.