LAS CASCADAS DE NORUEGA
Déjate llevar por la corriente
Siente la fuerza del agua precipitándose por la ladera de abruptas montañas.
Según la base de datos World Waterfall Database, diez de las treinta cascadas más altas del mundo se encuentran en Noruega.
Vøringsfossen, en la región de Hardangerfjord, es una de las cascadas más famosas y espectaculares de Noruega.
¿Te atreves a verla más de cerca todavía...?
Date un paseo por lo alto de este impresionante cañón.
Inspira, espira... ¡y recréate con las maravillosas vistas que tienes ante ti!
Vettisfossen, con un único salto de 275 metros, es la cascada más alta en caída libre de Noruega.
La cascada de las Siete Hermanas, que desemboca sobre el fiordo de Geiranger, Patrimonio de la Humanidad de la Unesco, es una de las más emblemáticas y que mayor atracción recibe de las cámaras en toda Noruega.
Para conocer más de cerca a estas hermanas, súbete a un ferry, una lancha turística o, mejor aún, ¡un kayak!
En algunas partes es posible ascender andando hasta la cima para regocijarte con unas vistas sublimes.
Langfoss es otro espectáculo para los ojos, con sus aguas que descienden desde la montaña a 600 metros de altitud hasta fundirse en el lecho del fiordo de Åkrafjord, en la Noruega de los fiordos.
La mejor época para disfrutar de las cascadas de Noruega es durante los meses de mayo y junio, que es cuando las corrientes de agua alcanzan su máximo caudal.
En alguna ocasión te puedes llevar un lavado de coche (o de cara) gratuito a tu paso por los alrededores de una cascada, como ocurre aquí, en Låtefoss.
Otras veces, podrás caminar por debajo de algún salto de agua, como en Steinsdalsfossen...
... o por encima, por ejemplo, en el parque nacional de Rago, en Salten, en el Norte de Noruega.
Si estas experiencias te siguen pareciendo algo livianas, pon a mil tu adrenalina cruzando una corriente de aguas blancas enganchado a una de las tirolinas más fascinantes que esconde Noruega.
Y si te apetece refrescarte, ¡ATRÉVETE A DAR EL SALTO!
El descenso de cañones es otra actividad de aventura para explorar cascadas de menor tamaño.
Eso sí, ¡siempre acompañado de un guía!
Para ver corrientes de agua en circulación no tienes que alejarte demasiado de la ciudad.
En Bærums Verk, disfrutarás además de un paseo artístico de regalo.
Habrá veces en las que quieras esconderte en una cascada privada.
Un deseo fácil de complacer, pues ¡las hay por todas partes!
En invierno, algunas cascadas se congelan y se convierten en una gigante pared, formando un verdadero paraíso para los aficionados a la escalada en hielo. Sin embargo, esta actividad solo está recomendada para escaladores experimentados, y siempre bajo la supervisión de un guía.
Para quienes quieran probar esta actividad por primera vez, podrán contratar una sesión guiada en SNØ, el complejo de esquí de interior de Oslo.