La ciudad de la navidad
OSLO
La noria da vueltas mientras una pareja comparte un momento romántico con una taza de vino caliente.
El invierno es una estación mágica en la animada capital noruega.
Personas de todas partes del mundo vienen hasta Oslo en busca del espíritu navideño. Sin duda notarás un ambiente muy festivo en el mercadillo de navidad de Spikersuppa, ubicado en la céntrica calle de Karl Johan.
¡Haz piruetas sobre la pista de hielo! Es gratis y abre todos los días durante el invierno.
Trae tus propios patines o alquila unos in situ.
Disfruta de las mejores vistas desde lo alto de la noria, date una vuelta por los puestos del mercadillo y cómete unos buenos donuts.
Junto a la noria encontrarás el impresionante Teatro Nacional.
En él podrás disfrutar de unas obras de navidad fantásticas. Para quienes no hablan noruego, un concierto es una muy buena alternativa…
… como cuando los niños del coro Sølvguttene (“Los niños de plata”) cantan nuestros villancicos en la catedral de Oslo. Te transmiten una gran sensación de calidez y todo el espíritu navideño.
Hay muchos más conciertos para elegir en la ciudad.
Dada su variedad de tiendas, Oslo es sin duda la mejor ciudad de Noruega para hacer las compras navideñas.
Pásate por Karl Johan, la calle principal, y también por las tiendas de Bogstadveien, Grünerløkka y del nuevo y moderno barrio de Oslobukta.
Otra zona excelente para ir de compras es Aker Brygge. Da una vuelta por su encantador paseo marítimo...
… y llegarás a Oslos Supermarked, un mercadillo de navidad alternativo ubicado en el punto cultural SALT, según cruzas el fiordo desde la ópera.
Está abierto durante los tres primeros fines de semana de Adviento. En él encontrarás productos de cerámica, accesorios, ropa, objetos de segunda mano y…
… ¡también podrás disfrutar de una buena sesión de sauna! Hay bastantes saunas en pleno fiordo a lo largo del paseo marítimo.
Puedes reservar con antelación o simplemente pasarte por allí para entrar bien en calor y/o darte un chapuzón helado.
Echa un vistazo al mercadillo de navidad del Museo Folklórico Noruego, situado al aire libre en Bygdøy.
Vive las tradiciones navideñas de los últimos 500 años en tradicionales casas centenarias que se han conservado cuidadosamente. Y quién sabe, ¡quizás conozcas a Fjøsnissen, el Papá Noel noruego!
Los platos navideños noruegos varían en función de la región.
Por suerte, la amplia gama de experiencias que conforman la oferta gastronómica de Oslo hace que sea posible probar un poco (¡o un mucho!) de todo.
Puede que sea difícil conseguir mesa. A los noruegos nos encanta celebrar Julebord una celebración de navidad que consiste en comer con amigos o compañeros de trabajo. Así que mejor reserva con antelación.
Haz una pausa entre mercadillos navideños para disfrutar del mejor chocolate caliente de la ciudad en el lujoso bar-biblioteca del Hotel Bristol o en la famosa pastelería Pascal, en Henrik Ibsens gate.
Algunos noruegos comen marisco, otros ribbe (costillas de cerdo), y otros prefieren el pinnekjøtt, (costillas de cordero). Si te atreves, prueba el lutefisk: bacalao secado a la sal y curado en lejía alimentaria.
Puedes probarlo en restaurantes como Lorry Restaurant, o Frognerseteren Restaurant Finstua, que cuenta con unas vistas de Oslo espectaculares (y también tiene una chimenea).
Sigue leyendo para descubrir más restaurantes buenísimos.
La nieve en diciembre no está garantizada, pero si llega a nevar…
… podrás ir a hacer esquí de fondo en las grandes llanuras que rodean la ciudad. También puedes visitar Holmenkollen y su museo del esquí, donde podrás adentrarte en más de 4000 años de historia del esquí y disfrutar de algunas de las mejores vistas panorámicas de Oslo desde la torre de saltos.
Holmenkollen cuenta además con una impresionante creación artística, Roseslottet, “El Castillo Rosado”.
Se trata de una obra para conmemorar el impacto de la Segunda Guerra Mundial en Noruega y que incluye más de 200 cuadros del reconocido artista noruego Vebjørn Sand, así como esculturas de Vebjørn y su hermano Eimund Sand.
Otro clásico del invierno es la pista de trineo.
Coge el metro hasta llegar a la estación de Frognerseteren y deslízate cuesta abajo en un recorrido de 2000 metros al que llaman Korketrekkeren (el sacacorchos). Si quieres repetir, solo se tarda 16 minutos en llegar en metro hasta arriba.
Independientemente del tiempo, en el centro de esquí de interior SNØ siempre encontrarás nieve.
SNØ te invita a su mercadillo de navidad, el cual abre sus puertas el último domingo de noviembre y durante los dos primeros fines de semana de diciembre.
¿Sabías que Oslo en poco tiempo se ha convertido en uno de los mayores núcleos artísticos de Europa?
Visita el nuevo Museo de MUNCH o el mayor museo de arte de los países nórdicos, el Museo Nacional. Oslo tiene mucho más que ofrecer a los apasionados del arte.
Si quieres disfrutar de una noche romántica en pareja, te recomendamos ir a una de las azoteas de la ciudad. En la imagen aparece Kranen bar, ubicado en la azotea del Museo MUNCH.
Espera a que anochezca para disfrutar de unas vistas mágicas con todas las luces de navidad.
¿Te contamos un secreto?
¡Santa Claus vive en Drøbak!
La Casa de Navidad de Tregaarden abre durante todo el año y está a tan solo 40 minutos en autobús de Oslo.
Todos los años, Santa Claus recibe unas 20 000 cartas de niños de todo el mundo en su buzón, y responde a unas 3000. Sería más rápido hacerlo por correo, pero él prefiere mantener las tradiciones.
Cogiendo un autobús en dirección oeste desde Oslo, llegarás al mercadillo navideño de Bærums Verk, donde podrás sentir todo el espíritu de la navidad.
Además de sus edificios históricos, podrás explorar sus galerías, artesanía e incluso montar en un carruaje tirado por caballos.
Oslo tiene algo mágico en esta época del año.
Pero no te preocupes si te pierdes la navidad. Hay muchas otras cosas que hacer en la ciudad durante el resto del año.
¡Que tengas una feliz navidad en Oslo!
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